jueves, 29 de marzo de 2012

Tarta de limón

Un sencilla receta de la que podríamos destacar  el contraste resultante  entre la acidez del limón y el dulce del resto de los elementos.


Ingredientes: 
  • Masa de hojaldre 
  • 4 limones, rallamos la cáscara de dos limones y sacamos el zumo de los cuatro.  
  • 150 gramos de azúcar
  • 4 huevos grandes
  • 200 ml de nata líquida
  • un puñado de garbanzos 

Estiramos sobre un molde de tartas la masa sin quitar el papel vegetal. De esta manera nos ahorramos tener que untar el molde con mantequilla. Nivelamos los bordes y recortamos el papel sobrante. Con un cuchillo pinchamos la base del hojaldre. 
Seguidamente cubrimos la masa con papel de aluminio y vertemos los garbanzos. Introducimos la masa en el horno previamente calentado a 180º y lo dejamos hornear durante 10 minutos.  


Mientras tanto, rallamos los dos limones que habremos lavado previamente. Hacemos un zumo de 4 limones En un vaso batidor echamos el azúcar los huevos, la ralladura del limón, la nata y el zumo del limón. Pasamos por la batidora con varilla durante aproximadamente 5 minutos. Vemos que la mezcla se va espesando algo. Sacamos del horno el hojaldre. Retiramos los garbanzos y el papel de aluminio.



Vertemos el contenido del baso batidor en el molde y volvemos a introducir en el horno durante 30 minutos a 180º.



Antes de sacar comprobar que la mezcla ha cuajado. Dejar enfriar antes de desmoldar. 

Listo.  

"Lasaña manchega"

La lasaña es uno de los platos más socorridos y versátiles que conozco. Admite todo tipo e rellenos. Resulta bastante práctica  especialmente cuando hay que preparar una comida para una tropa numerosa. Hoy me he decidido por una lasaña vegetal o vegetariana con un relleno muy parecido a un pisto manchego. Por ese motivo la he bautizado como  "Lasaña Manchega". 


Ingredientes para 4 comensales:


  • Lasaña precocinada
  • Queso rallado


Para el relleno:



  • 2 cebollas
  • 2 puerros
  • 2 dientes de ajo
  • 1 calabación
  • 1 pimiento verde
  • una lata  pequeña de pimientos del piquillo 
  • 1 lata de tomate triturado de 500 gramos ( o 700 gramos de tomates muy maduros)
  • dos cucharadas soperas rasas de azúcar
  • dos cucharadas soperas de aceite de oliva virgen
  • sal
  • pimienta recién molida
Para la bechamel

  • dos cucharadas soperas de aceite
  • 5 cucharadas soperas colmadas de harina
  • 50 gramos de mantequilla
  • 1 litro de leche (puede ser desnatada
  • Nuez moscada
  • Aceite


Comenzamos picando en juliana la cebolla, el puerro, las cabezas de ajo, el pimiento verde y los piminentos del piquillo. Ponemos una sartén al fuego con dos cucharadas de aceite de oliva. Añadimos  primero los ajos que dejaremos unos segundos, sin que se lleguen a quemar,  para dar sabor al aceite y a continuación añadimos la cebolla, el puerro, el pimiento verde y el pimiento rojo. Dejamos que se vaya pochando hasta que la cebolla quede transparente, de cinco  a diez minutos. No pongas el fuego demasiado fuerte y remueve con una cuchara de madrea. El éxito de la buena cocina radica en la paciencia.   



Mientras se van pochando los ingredientes anteriores cortamos en láminas muy finas el calabacín y lo añadimos.





Dejamos pochar otros cinco minutos a fuego suave y después añadimos el tomate triturado.


Yo he utilizado tomate triturado de lata. Para este tipo de preparaciones es una opción muy  convincente.
En el caso que tuvieras tomates muy maduros, los tendrás que pelar. Para poder pelarlos con facilidad  puedes introducirlos primero en agua hirviendo durante un minuto. Después cortamos los tomates en cuartos, los añadimos a  la sartén y los aplastamos   con la cuchara de madrea.
Para reducir la acidez del tomate añadimos dos cucharadas de azúcar. Salpimentamos y dejamos a fuego suave durante 20 minutos.


Antes de continuar con la bechamel. Preparamos las placas de lasaña siguiendo las instrucciones del fabricante.  Normalmente hay que dejarlas en remojo. Pasado el tiempo de remojo estiramos un paño, se sobreentiende que hablamos de un paño limpio, y estiramos las placas para su secado.

Mientras que se van preparando los ingredientes anteriores ponemos un poco de aceite en una sartén añadimos la mantequilla y dejamos calentar.





Después añadimos la harina de golpe y removemos con una cuchara de madrea. Es muy importante remover y freir la harina para que se vaya  tostando. De esta manera se quita el regusto a harina cruda.



 

Después vamos añadiendo la leche  en pequeñas cantidades. Como hemos comenzado la preparación con una mezcla de aceite y mantequilla no pasa nada si utilizamos leche desnatada para terminar de hacer la bechamel. 
Vamos removiendo la mezcla para que nos se formen grumos. Yo recomiendo no echar toda la leche de golpe. Hay que remover de manera continua y añadir leche cuando vemos que la mezcla queda demasiado seca. Para hacer una bechamel decente no dejes de remover durante al menos 20 minutos.  Al final añadimos la nuez moscada que habremos rallado con anterioridad y rectificamos de sal.



Con la ayuda de un pincel de cocina cubrimos con aceite  una fuente resistente al horno.


A continuación ponemos una capa de placas de lasaña cubrimos con nuestro relleno y un poco de queso rallado y bechamel. Para esta receta viene muy bien un  queso fuerte tipo manchego.


Completamos con  otra capa de placas de lasaña y encima echamos el resto del relleno. Cubrimos con una  placa de lasaña. Ponemos el resto de la bechamel y terminamos cubriéndola con el  queso rallado.


Introducimos la fuente en el horno previamente calentado a 180 grados durante 20 a 25 minutos.

A comer














lunes, 19 de marzo de 2012

APFELSTRUDEL "EXPRESS"

La receta de hoy se es un clásico de la repostería vienesa con el que acompañar un buen "Kaffee mit Schlag" (café con nata) en cualquiera de los grandes y señoriales cafés vieneses como el Cafe Landtmann (http://www.landtmann.at) cerca del Burgtheater o  el Café Central en Palais Ferstel situado en la  Herrengasse, dos de los más conocidos por aquellos que han visitado alguna vez Viena.   






Hablando de cafés vieneses, uno de mis favoritos, aunque más bohemio que señorial,  es el Hawelka Café  http://www.hawelka.at. Pero hoy toca hablar del Apfelstrudel, que es un rollo que se hace con una  masa parecida al hojaldre relleno de manzanas, pasas, almendras y que los vieneses suelen comer acompañado por una crema de vainilla. En esta entrada del blog me voy a  a liar con  una variedad "express" para hacer en casa un Apfelstrudel en un santiamén.  Podremos utilizar como masa de este Apfelstrudel  masa de hojaldre o masa filo. 


Dificultad: sencillo


Tiempo: 1 hora, de horneado 25 minutos


Ingredientes. 




  • Un rollo de masa de hojaldre o 8 láminas de masa filo
  • 3 a 4 manzanas reineta (3 si son muy grandes)
  • 80 gramos de uvas pasas
  • 40 gramos de almendras laminadas
  • El zumo de un limón 
  • Medio vaso de ron
  • Un huevo batido
  • Medio vaso de Cassis
  • Mantequilla
  • Pan rallado

Preparación. 

Pelamos las manzanas y las cortamos como patatas para una tortilla española. Mezclamos en un bol  las manzanas con el zumo de limón, las uvas pasas, las almendras laminadas, el medio vaso de ron y el de cassis. Revesar (30 minutos)
A continuación, echamos en una sartén una nuez de mantequilla y freímos el pan rallado. Dejar enfriar.
Extendemos un paño de cocina limpio sobre la encimera. Espolvoreamos, como hacemos cada vez que vamos a amasar,  un poco de harina y así evitaremos que nuestra  masa de hojaldre se pegue al paño mientras la estiramos. A continuación colocamos encima la masa de hojaldre 




y con la ayuda de un rodillo de cocina la trabajamos hasta que quede extremadamente fina sin que se llegue a romper. 


Seguidamente repartimos primero, el pan rallado y después la mezcla de manzana, pasas y almendras desechando el líquido. El pan rallado absorberá parte del zumo que van soltando las manzanas mientras horneamos el "strudel"



La parte más delicada es el enrollado. Primero deberemos sellar los bordes laterales. Para ello doblamos a mano el hojaldre como podréis ver en la foto adjunta: 



Y ahora debemos enrollar el "strudel" con la ayuda del paño de cocina. Para ello tiramos en dirección horizontal un poco del paño hasta que sobresalga de la encimera. A continuación, tiramos en dirección vertical hasta que la masa y su contenido se enrolle sobré si misma. 



Vamos repitiendo estos movimientos para completar el enrollado. 



En la última vuelta pintamos, con un pincel untado en huevo batido, el borde superior de la masa de hojaldre  para conseguir un perfecto sellado del rollo 



Disponemos una hoja de  papel sulfurizado sobre la placa de horneado. Si no tenemos este papel, y para evitar que el "Strudel" se nos pegue, deberemos  untar con un poco de mantequilla la placa y espolvorearla con harina, desechando la harina restante. Con la ayuda del paño de cocina   colocamos el  "Apfelstrudel" sobre la placa de horno. 



Seguidamente pintamos el "Apfelstrudel" con el huevo batido restante y lo introducimos en el horno que habremos precalentado de 180-190º y lo dejamos  hornear durante 25 minutos.  
Pasado ese tiempo sacamos el "Strudel" del horno, dejamos enfriar y lo espolvoreamos con azúcar glas. 




Como comenté al principio, la receta original, no se hace ni con masa de hojaldré ni con masa filo. El "Strudel" se puede comer frío o caliente y suele ir acompañado de una crema de vainilla. Otro día, no tan lejano, me comprometo hacer la receta clásica con la crema de vainilla incluida. De momento, aquí os dejo esta receta de un Apfelstrudel Express .  

Y como diría un vienés " Mahlzeit und bis zum nächsten Mal"

Animaros. 

  




  

sábado, 17 de marzo de 2012

Judiones de la Granja con morcilla de Burgos

Una receta de fabada distinta. Se asemeja mucho a la receta tradicional pero la morcilla de Burgos le da un sabor distinto. No es tan pesada. Curiosamente aprendí este "truco" de alguien, que ponía muchísima voluntad en la cocina, pero que cocinaba muy mal. Pero he de reconocer que sus judías con morcilla de Burgos, cuando no se le pegaban, estaban muy buenas. Para muchos esta receta será  una "herejía", pero puede que en la variedad esté el gusto.


Tiempo 3 horas y media


Dificultad: media


Ingredientes para 4-6 personas


  • Judión de la granja 500 gr
  • 1 hueso de jamón o una punta de jamón
  • 2 chorizos (yo los compro gallegos, en Madrid hay una panadería muy famosa del centro dónde los puedes encontrar)
  • 2 morcillas de Burgos
  • 250 gr de bacon ahumado



  • 1 cebolla pelada y entera
  • 1 nabo pelado
  • 1 puerro limpio. Nos quedamos con la  parte blanca
  • 3 zanahorias peladas y enteras
  • 4 dientes de ajo pelados
  • Chorro de aceite de oliva virgen
  • Sal
  • Pimienta
  • Pimentón dulce (optativo)
  • 2 hojas de laurel

Debemos dejar reposar los judiones en agua durante 10 horas. Lo normal es dejarlos en agua  la víspera.






Poner los judiones en un cazo con agua fría y llevar a ebullición. Cuando hierva el agua retirarlo del fuego y pasar los judiones por un colador y rellenar el cazo con agua fría. Hay que repetir tres veces este proceso. A esto se le llama asustar a las judías.






Una vez asustados los judiones, volvemos a meterlos en el cazo y los cubrimos con agua fría. El nivel del agua debe quedar 2 dedos sobre el nivel de los judiones. En frío, añadimos  la cebolla, la zanahoria, el puerro, los ajos, el bacon , el hueso o punta de jamón, las hojas de laurel, y la pimienta. Dejar hervir a fuego lento durante 2 horas. Lo dicho a fuego lento, lento. Este es el truco y no hay otro para que salgan tiernos los judiones.




Pasadas las dos horas probamos un judión para ver su punto de cocción y de sal. Si vemos que le falta sal añadimos sal. No salaremos al principio porque el jamón suelta sal. Añadimos los dos chorizos y retiramos la zanahoria, el puerro, la cebolla y el nabo.










Estos ingredientes los meteremos en un vaso mezclador y los trituraremos muy finos con un poco de caldo. Dejamos cocer otros veinte minutos.


Pasado este tiempo añadimos las dos morcillas a las que habremos hecho unas pequeñas incisiones y vertimos el contenido del vaso mezclador, revolvemos con cuidado y dejamos que todo hierva a fuego muy suave otros 15 minutos más. Esta mezcla hará que se espese aún más el caldo de los judiones.


Finalmente comprobamos si el judión está en su punto y emplatamos. Para ello sacamos la morcilla, el chorizo y el bacon de la olla y los cortamos en porciones sobre una tabla para servir. Añadimos uno o dos tajos a cada ración de judiones y listo.




Esto es una auténtica bomba. Conviene no abusar aunque están o estaban de muerte.
Animaros


Algo más que un puré de patatas

Hoy vamos con algo extremadamente sencillo pero que en mi casa tiene bastante aceptación. Es un simple puré de patatas o una crema de puerros.


Tiempo 40 minutos


Dificultad: sumar es más difícil




Ingredientes para 2-3 personas:






  • 3 puerros
  • 1 o 2 patatas
  • 2 vasos de leche (se puede hacer con leche desnatada)
  • aceite
  • sal
  • pimineta  





Como puedes ver no son ni cuatro ingredientes.

Comenzamos limpiando los puerros que cortaremos a continuación en juliana. Pochar el puerro cortado en una cacerola que habremos puesto al fuego con tres cucharadas soperas de aceite. 




Mientras que el puerro se va pochando a fuego lento. pelamos las patatas,  las lavamos y las cortamos. En este caso he utilizado patata gallega. Pasados unos tres minutos veremos que los puerros van quedando en su punto y echamos las patatas cortadas y las dejamos freír mientras que le damos vueltas de vez en cuando.




Pasados unos cinco minutos añadimos la leche hasta cubrir las patatas y el puerro. Salpimentar y hervir  a fuego lento durante aproximadamente 25 minutos hasta que las patatas estén blandas. Esto dependerá del tipo de patata.  

.  
Finalmente trituramos en caliente, pero con mucho cuidado. 

 Emplatamos y listo


domingo, 11 de marzo de 2012

Pizza de berenjenas con reducción de vinagre de módena

Para empezar este blog me he decidido por una receta sencilla. Es una pizza con un toque dulce que resulta bastante curioso. Ideal para quedar a ver, con los colegas, un partido de fútbol en casa o para cualquier cena informal.


Ingredientes


Para la masa


  • Harina (vaso y medio)
  • Agua tibia (1/8l)
  • Levadura (de panadería) ahora también la comercializan en algunas cadenas de supermercados. 
  • Orégano
  • Aceite de oliva virgen (tres cucharadas soperas)
  • Sal
Para completarla 
  • Mozzarella 
  • 1 Berenjena pequeña
  • 1 Tomate maduro
  • Harina para rebozados
  • Queso rallado 
  • Tres cucharadas soperas de vinagre balsámico de Módena
  • 1 cucharada de azúcar
  • 1 cucharilla  de miel. (Tamaño cuchara para el café)
  • Aceite de girasol o oliva suave (para freír las berenjenas)
  • Sal 
  • Orégano fresco








Primero lavamos la berenjena. Que no sea demasiado grande. La cortamos en láminas finas. Salamos las láminas y las colocamos sobre una rejilla o un escurridor para que vayan soltando el agua. 

A continuación  formamos con la harina y sobre la encimera un volcán coronado por  un hueco en la parte superior. Es dentro  de ese hueco dónde echamos el aceite,  la sal y el orégano seco. En un vaso mezclaremos la levadura con el agua tibia. Revolver con paciencia hasta que la mezcla quede homogénea. Una vez mezclado lo incorporamos a la harina y amasamos el conjunto durante aproximadamente 3 minutos. Si vemos que la masa queda demasiado seca podemos añadir algo más de agua o aceite y en el caso de quedar demasiado pegajosa podemos corregirlo añadiendo algo de harina. Si ves que la masa ya no se te pega ni entre los dedos ni a la encimera es que la mezcla empieza a tener la consistencia correcta  y vas por buen camino.  Una vez amasada colocamos la masa en un bol y lo cubrimos con un trapo de cocina húmedo. Reservar y dejar reposar al menos 30 minutos para que doble, como por arte de magia, su volumen.  

Ponemos a calentar una sartén con un dedo de aceite. Secamos las rodajas de berenjena con papel cocina o un trapo de cocina limpio y los pasamos por harina especial para rebozados. Freímos las rodajas  (vuelta y vuelta). A fin de retirar el aceite sobrante colocamos las rodajas de berenjena ya fritas sobre  un plato con papel cocina. 

Sobre la placa de horno colocar una hoja de papel sulfurizado. Espolvorear con un poco de harina la encimera y trabajar la masa estirándola y dándole una forma rectanguar como la placa o circular como una pizza tradicional. A continuación, cortamos la mozzarella y el tomate en rodajas. Sólo queda ir colocando primero la mozzarella, después las rodajas de tomate, el queso rallado, el orégano fresco y finalmente las berenjenas. Introducimos la placa en el horno precalentado a 220º y dejamos hornear de 18 a 20 minutos. 

Mientras nuestra pizza se va haciendo, vertemos en un cazo el vinagre de Módena y el azúcar. Dejar que hierva y esperar que reduzca. Retirar del fuego. Añadir una cucharada de miel. 

Una vez horneada sacar la pizza del horno y verter la reducción sobre las berenjenas. 

Truco: si ves que al enfriarse la reducción queda demasiado espesa puedes introducirla, justo antes de utilizarla,  unos segundos en el microondas.  Eso sí, sólo unos segundos. 

Y ya está. 

Que lo disfrutes.