domingo, 11 de marzo de 2012

Pizza de berenjenas con reducción de vinagre de módena

Para empezar este blog me he decidido por una receta sencilla. Es una pizza con un toque dulce que resulta bastante curioso. Ideal para quedar a ver, con los colegas, un partido de fútbol en casa o para cualquier cena informal.


Ingredientes


Para la masa


  • Harina (vaso y medio)
  • Agua tibia (1/8l)
  • Levadura (de panadería) ahora también la comercializan en algunas cadenas de supermercados. 
  • Orégano
  • Aceite de oliva virgen (tres cucharadas soperas)
  • Sal
Para completarla 
  • Mozzarella 
  • 1 Berenjena pequeña
  • 1 Tomate maduro
  • Harina para rebozados
  • Queso rallado 
  • Tres cucharadas soperas de vinagre balsámico de Módena
  • 1 cucharada de azúcar
  • 1 cucharilla  de miel. (Tamaño cuchara para el café)
  • Aceite de girasol o oliva suave (para freír las berenjenas)
  • Sal 
  • Orégano fresco








Primero lavamos la berenjena. Que no sea demasiado grande. La cortamos en láminas finas. Salamos las láminas y las colocamos sobre una rejilla o un escurridor para que vayan soltando el agua. 

A continuación  formamos con la harina y sobre la encimera un volcán coronado por  un hueco en la parte superior. Es dentro  de ese hueco dónde echamos el aceite,  la sal y el orégano seco. En un vaso mezclaremos la levadura con el agua tibia. Revolver con paciencia hasta que la mezcla quede homogénea. Una vez mezclado lo incorporamos a la harina y amasamos el conjunto durante aproximadamente 3 minutos. Si vemos que la masa queda demasiado seca podemos añadir algo más de agua o aceite y en el caso de quedar demasiado pegajosa podemos corregirlo añadiendo algo de harina. Si ves que la masa ya no se te pega ni entre los dedos ni a la encimera es que la mezcla empieza a tener la consistencia correcta  y vas por buen camino.  Una vez amasada colocamos la masa en un bol y lo cubrimos con un trapo de cocina húmedo. Reservar y dejar reposar al menos 30 minutos para que doble, como por arte de magia, su volumen.  

Ponemos a calentar una sartén con un dedo de aceite. Secamos las rodajas de berenjena con papel cocina o un trapo de cocina limpio y los pasamos por harina especial para rebozados. Freímos las rodajas  (vuelta y vuelta). A fin de retirar el aceite sobrante colocamos las rodajas de berenjena ya fritas sobre  un plato con papel cocina. 

Sobre la placa de horno colocar una hoja de papel sulfurizado. Espolvorear con un poco de harina la encimera y trabajar la masa estirándola y dándole una forma rectanguar como la placa o circular como una pizza tradicional. A continuación, cortamos la mozzarella y el tomate en rodajas. Sólo queda ir colocando primero la mozzarella, después las rodajas de tomate, el queso rallado, el orégano fresco y finalmente las berenjenas. Introducimos la placa en el horno precalentado a 220º y dejamos hornear de 18 a 20 minutos. 

Mientras nuestra pizza se va haciendo, vertemos en un cazo el vinagre de Módena y el azúcar. Dejar que hierva y esperar que reduzca. Retirar del fuego. Añadir una cucharada de miel. 

Una vez horneada sacar la pizza del horno y verter la reducción sobre las berenjenas. 

Truco: si ves que al enfriarse la reducción queda demasiado espesa puedes introducirla, justo antes de utilizarla,  unos segundos en el microondas.  Eso sí, sólo unos segundos. 

Y ya está. 

Que lo disfrutes.  



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